Pontificia y Real Cofradía de nuestro Padre Jesús Nazareno y Nuestra Señora de la Misericordia

Historia de la Cofradía

El inicio

 Según consta en las antiguas Ordenanzas de la cofradía, fechadas en 1609, las cuales están depositadas en el Archivo Diocesano de Cáceres, figura inscrita en el año del Señor de 1.464 la Cofradía de la Misericordia. Incardinada en la Parroquia de Santiago de Cáceres, tenía como objeto dedicarse a obras de caridad y misericordia, debiendo, entre otras cuestiones, dar cristiana sepultura a los pobres e indigentes, y teniendo que asistir, junto con la Cofradía de la Paz y la Caridad, a las ejecuciones de los reos y atender a su inhumación, exequias y sufragios.

Acompañaban al reo desde la cárcel hasta el patíbulo, y la comitiva la iniciaba un Crucifijo (el Cristo de los Milagros, que continúa en propiedad de la Cofradía) acompañado por dos cofrades con hachas encendidas, para seguir con el condenado y los justicias, y tras pedir autorización para recoger los restos mortales del ajusticiado (que, salvo que el reo fuese reducido a cuartos o hubiera sido condenado a permanecer en la picota, les era concedido), realizar la inhumación, honras fúnebres y sufragios. Previamente los cofrades habían salido por caminos, calles y plazas pidiendo limosna con el fin de atender los gastos de sepultura, mortaja y exequias.

 

La Cofradía tenía como titular a la Virgen Madre de Dios, en su advocación de Nuestra Señora de la Misericordia, y festejaba su fiesta el 8 de Diciembre celebrando misa cantada en el altar donde la cofradía tiene su imagen titular, que era la capilla que pertenecía a los condes de Cabezalbo, la que actualmente ocupa Jesús Nazareno.

 

El día anterior a la fiesta, esto es, el 7 de Diciembre, después de la misa, que se aplicaba por los cofrades vivos y difuntos, se debía reunir el cabildo para elegir al mayordomo y los alcaldes para el servicio de la cofradía durante el próximo año.

Imagen de Jesús Nazareno

 

Hasta las Ordenanzas de 1609 no se conoce prácticamente de la cofradía por no existir documentación, salvo lo conocido a través del Libro de Acuerdos, abierto en el año de 1599; libro que, por los años 1950, don Tomás Pulido (que, por cierto, era directivo de esta hermandad) adquirió en un rastro y lo donó a la cofradía. Durante los años anteriores, la cofradía languidecía lentamente, limitándose solamente a cumplir con los enterramientos de los cofrades y celebrar su fiesta el día de la Purísima. Así vemos cómo, con motivo de la visita pastoral del nuevo Obispo Diocesano, D. Pedro García de Galarza, celebrada en la Iglesia Parroquial de Santiago el Mayor, donde estaba ubicada la Cofradía de la Misericordia, y por mandato del mencionado obispo, se encarga al escultor Tomás de la Huerta, por un importe de 300 reales, una talla de Jesús con la Cruz a cuestas, «para la procesión de los nazarenos que se saca en la Semana Santa». En ese año de 1609 la Cofradía de la Misericordia estrena la imagen del Nazareno y se hizo una procesión extraordinaria, de acuerdo con la sesión de 8 de marzo. El estandarte de la cofradía lo llevaría un caballero; las andas de Nuestra Señora de la Misericordia las llevarían cuatro diputados, y otros cuatro hombres llevarían las andas del Nazareno y más imágenes que se hicieren. La primera salida procesional de la nueva imagen, fue el día 12 de Abril de 1609, llevando el pendón de la cofradía el caballero D. Gabriel de Saavedra, y para regir la procesión se designó a D. Juan de Carvajal y a D. Pedro Rol de Ovando, alférez perpetuo de la villa.

 

El hábito consistía en una túnica morada para los hermanos de carga, ceñida con un cíngulo de esparto. En la actualidad, el cíngulo de esparto ha sido sustituido por cordones de lana amarilla, uno al cuello y otro a la cintura, conservando la túnica morada.

 

Con la aprobación de las nuevas ordenanzas de 1609 por el Obispo de la Diócesis, D. Pedro García de Galarza, se denomina desde entonces Cofradía de Nuestra Señora de la Misericordia y Jesús Nazareno. Estas Ordenanzas están depositadas en el Archivo Diocesano, en el Palacio Episcopal de Cáceres y son las más antiguas conocidas de la cofradía.

La cruz de carey del Nazareno

En el año de 1775, se adquiere para la imagen de Jesús Nazareno una cruz de pinabete, forrada de carey y rematada en plata en las aristas y con cuatro azucenas de plata en las puntas. El autor o autores de la mencionada cruz de carey se desconocen, aunque hay estudiosos que apuntan a un artesano de apellido Valbuena, y otros se decantan por otro cuyo apellido sería Blanco, a juzgar por las marcas de platero que se han encontrado en la cruz, en las que se leen con facilidad las letras «BLco». Es posible que el entallador que fabricó el interior de la cruz, en madera, fuese  Pedro Barrés.

Capilla del Nazareno

 

Motivado por la gran afluencia de fieles devotos de la imagen de Jesús Nazareno, se ve la necesidad de ampliar la capilla de la Virgen y, a expensas del pueblo de Cáceres, construir otra para «la Santísima Ymagen de Jhesús Nazareno, sita en la parrochial del Señor Santhiago desta villa a espensas de la devoción deste pueblo y a instancias de un corazón devoto que con esta cofradía logró su deseo por medio de sus limosnas, de todo lo qual corrió a cuenta de dicho commisionado, dando principio el día once de junio de mil setecientos ochenta y cuatro».

 

La capilla queda concluida el 15 de Julio de 1786, siendo Mayordomo D. José Paredes, y la imagen de Jesús nazareno se coloca en ella, presidiéndola en un camarín al fondo. En ese mismo año, en sesión del 20 de Mayo, se acuerda solicitar licencia para dar entrada a este camarín por la capilla de las ánimas, propiedad de los Guzmanes, licencia que fue concedida por D. Gonzalo María de Ulloa y Lugo, según consta en el Archivo Diocesano de Cáceres.

 

Como consecuencia de las obras de restauración del templo, ordenadas por la Dirección General de la Vivienda en el año 1978, da comienzo el derribo de las capillas de los titulares de la cofradía, es decir, la capilla del Nazareno y la capilla de Nuestra Señora de la Misericordia. La pequeña capilla de la Virgen desaparece del todo, y la de Jesús Nazareno queda acortada en sus dimensiones, aunque permanece la artística verja de hierro que se colocó en el período de la mayordomía de D. Santos Floriano, en el año 1950. La capilla de Jesús Nazareno ha tenido a lo largo de su historia, tres artísticas verjas: la primera de ellas, de madera, se encuentra actualmente cerrando el baptisterio de la iglesia de San Juan, en Cáceres; la segunda una verja decimonónica de hierro, es la que ahora está cerrando el baptisterio de la iglesia de Santiago, donde también están las imágenes del Calvario, y la tercera es la que actualmente tiene, que hace juego con la que separa el presbiterio del crucero de la iglesia. En la actualidad, y en una hornacina existente en la capilla de Jesús Nazareno, se halla colocada la cruz de plata que remataba la antigua verja de madera.

 

Durante el período de reforma y obras en la iglesia de Santiago, en los años 80 del siglo XX, las imágenes titulares estuvieron al culto en la Ermita de la Paz, ubicada en la Plaza Mayor, y perteneciente por demarcación parroquial a Santiago.

 

 

Breve pontificio del Papa Pío VII

 

En el año VI del pontificado del Papa Pío VII, y fechado en Roma el día 24 de Enero de 1806, el citado Sumo Pontífice promulga un breve para perpetua memoria, mediante el cual se conceden indulgencias a los hermanos de la cofradía.

 

El Breve dice lo siguiente:

 

PIO Papa VII PARA PERPETUA MEMORIA  Deseando promover llenos de piadosa caridad con los celestiales tesoros de la Iglesia, la religión de los fieles y la salvación de las almas, concedemos misericordiosamente en el Señor indulgencia y remisión de todos sus pecados a todos y cada uno de los hermanos y hermanas de la Cofradía titulada de Jesús Nazareno, erigida canónicamente, como se ha demostrado, en la Iglesia Parroquial de Santiago de la Ciudad de Cáceres, diócesis de Coria, y a todos los demás fieles de Cristo, hombre y mujeres, verdaderamente arrepentidos y confesados y fortalecidos con la Santa Comunión que visitaren devotamente la Iglesia predicha en un día del año designado por el Ordinario, desde las primeras vísperas hasta la puesta del sol del día señalado todos los años, y, allí rogaren a Dios por la concordia de los príncipes cristianos, extirpación de las herejías y exaltación de la Santa Madre Iglesia. = Además, a los mismos hermanos y hermanas y a todos los demás fieles de Cristo, de uno y otro sexo que igualmente arrepentidos, confesados y comulgados, asistieren piadosamente por algún espacio de tiempo a la Exposición del Santísimo Sacramento de la Eucaristía, que con licencia del Ordinario ha de hacerse en la misma Iglesia en los nueve días continuos que inmediatamente procedan a dicho día, concedemos de igual modo indulgencia plenaria y remisión de todos sus pecados en uno sólo de estos nueve días, que cada uno elegirá a su arbitrio. = En los otros ocho días mencionados, concederemos siete años y siete cuarentenas. = Además, a todos los fieles predichos que al menos contritos visitaren esta Iglesia en cualquier día del año y oraren en la forma preceptuada, concedemos doscientos días de indulgencia, o les perdonamos de cualquier otro modo las penitencias en la forma acostumbrada por la Iglesia. = No constando nada en contrario. = La presente valdrá para los tiempos futuros. = Dado en Roma, junto a Santa María la Mayor, bajo el anillo del Pescador, el día 24 de Enero de 1806. Año VI de nuestro Pontificado.

 

Dicho documento se custodia en el archivo de la cofradía.

 

Privilegio del Papa San Pío X para la fiesta principal de la cofradía

 
La cofradía celebra su fiesta principal coincidiendo con la festividad de la Exaltación de la Santa Cruz, que la Iglesia Católica celebra el 14 de septiembre. Y a este respecto, el día 19 de junio de 1905, el Papa San Pío X, mediante el Cardenal Prefecto de la Congregación para el Rito Sagrado, Mons. Luigi Tripepi, promulgó una bula a favor de la cofradía, por la cual le concede el privilegio de celebrar la fiesta de la Exaltación de la Cruz el domingo siguiente al día 14 de septiembre, en el caso de que dicha fecha no coincida en domingo.
 
Por todo ello, y también a la luz de la historia de la cofradía, se celebra el novenario de Nuestro Padre Jesús Nazareno en los días de la Exaltación de la Cruz, y además continúa con la muy antigua tradición de la mesa de ofrendas, y también con la celebración de una misa por los difuntos de la cofradía al día siguiente de la celebración de la Fiesta Principal.

Los títulos de Pontificia y Real Cofradía

Después de varios requerimientos a la cofradía por parte de la Real Audiencia de Extremadura, la cual manifestaba que todas las cofradías que no tuviesen sus ordenanzas aprobadas por S.M. el Rey no se darían por constituidas (y se otorgaría la antigüedad de acuerdo con su nueva fecha de aprobación) se registran en dicho tribunal unas nuevas ordenanzas, que son aprobadas por S.M. el Rey D. Fernando VII en el año de 1829, dando así el título de Real a la Cofradía de Ntro. Padre Jesús Nazareno y Ntra. Sra. de la Misericordia, para sumarse después el título de Pontificia, debido los privilegios promulgados mediante breves pontificios y bulas a favor de la Cofradía, ya referidos anteriormente. Queda desde entonces, y hasta la actualidad, establecida la denominación completa de la cofradía como:

 Pontificia y Real Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y Nuestra Señora de la Misericordia

En las Reales Ordenanzas de 1829, que reforman ligeramente las del año 1464, se señalan los cultos que se han de celebrar y que eran los siguientes: una fiesta principal a Nuestra Señora de la Misericordia «que se hará el 8 de Diciembre de cada año con misa cantada con Diáconos órgano y sermón y vísperas con órgano». A continuación consigna: «que el día 14 de Septiembre de cada año, se celebre fiesta a la Santísima Imagen de Jesús Nazareno con misa con diáconos y sermón y asimismo que el día después de la fiesta a Nuestra Señora, se diga misa cantada con su responso por los hermanos vivos y difuntos, si tiene cabimiento…»

En la reunión del cabildo de la cofradía celebrado el día 7 de diciembre de 1860 y dado que cada vez es mayor el número de devotos que acuden a los actos del novenario de Nuestro Padre Jesús Nazareno, se acuerda trasladar la imagen al altar mayor de la parroquia para la celebración de los cultos anuales. Hay que hacer constar que los cabildos de la cofradía se celebraban el día que por aquel entonces era su fiesta principal, esto es, el 7 de diciembre, y siempre en la sacristía de la iglesia o en la capilla del Nazareno.

Procesiones de Semana Santa

 La procesión que organiza esta cofradía ha sufrido diversas modificaciones. En los primeros años, en la tarde del Jueves Santo desfilaba la Virgen de la Misericordia, pero a partir de 1609 la procesión se celebró con los dos titulares de la Cofradía, saliendo el Viernes Santo al despuntar el alba. A la procesión concurrían todos los cofrades con túnicas moradas ceñidas con cordones de esparto, y con cruces sobre los hombros, acompañando a las imágenes de Jesús Nazareno y de Nuestra Señora de la Misericordia. La procesión visitaba los sagrarios de las demás parroquias. Hubo unos años en que esta procesión se trasladó al Miércoles Santo, saliendo después de la hora de tinieblas, pero la cofradía, el 10 de enero de 1847, acuerda que vuelva a celebrarse el Viernes Santo, y desde entonces no ha vuelto a haber variación. Después se le incorpora la Santa Mujer Verónica hasta el año 1858; desde 1859 se aumenta el desfile procesional con los pasos de la Magdalena y San Juan. Por esa época, después de rezar los salmos con todos los cofrades dentro del templo, se organiza la procesión para visitar todos los sagrarios de las demás parroquias, tomando el itinerario hacia San Juan, donde después de rezar ante el sagrario y cantar otros salmos, se continúa hacia San Mateo, haciendo la misma operación y pasando a la parroquia de Santa María la Mayor (hoy Concatedral), para terminar en Santiago de los Caballeros o Santiago el Mayor, donde una vez los hermanos han colocado las imágenes en sus lugares, se entonaba el canto del Miserere y terminaba la procesión.

Con la excepción de la imagen de Jesús Nazareno, ninguna de las otras citadas son las que figuran en las procesiones actuales. De la primitiva imagen de Nuestra Señora de la Misericordia, nada se ha podido averiguar hasta el momento.

 

 

 

La primera fotografía que se efectuó a la imagen de Jesús Nazareno fue realizada en 1868 por el Conde de Lipa, Ludwik Tarszeński Konarzenski, entonces fotógrafo de la Casa Real, en una de sus visitas a la ciudad de Cáceres. Es una foto en la que Jesús Nazareno está en la puerta Oeste de la iglesia parroquial de Santiago el Mayor (o Santiago de los Caballeros), con una corona de espinas natural, túnica bordada sin cíngulo, y subido en una peana de madera decorada con estuco. 

 

Es, probablemente, la segunda fotografía más antigua de las que se conservan en Cáceres, siendo la primera la que tomó el mismo fotógrafo cuando se colocó la primera piedra del actual edificio del Ayuntamiento de la ciudad.

 

 

El Siglo XX

 En el siglo XX, y después de la mayordomía de D. Antonio Quirós Díez, que duró desde 1880 hasta 1900, ocupó el cargo muy brevemente D. Nicolás Carvajal, que también era Alcalde de Cáceres, y desde 1901 a 1915 hay un período de interinidad en la que se encargan de la cofradía los sacerdotes coadjutores de la parroquia, pues prácticamente no hay más que dos cargos: el Director Espiritual y el Mayordomo, que se preocupan de organizar respectivamente el novenario y la procesión del Viernes Santo. Sin embargo, en 1904, durante el breve período de la mayordomía de D. Nicolás Carvajal, se adquiere el actual paso de María Magdalena; después, concretamente en 1.913, Dª Trinidad Cotrina, viuda de Higuero, regala a la Cofradía la imagen de la Verónica, y en 1914 se incorpora a la procesión el paso de Nuestra Señora de las Angustias, que fue adquirido -en una exposición de arte religioso en Madrid- por D. Santiago Gaspar Gil, que era el cura ecónomo de la parroquia, y quien donó el mencionado paso a la cofradía.

 

En 1916 se hace cargo de la mayordomía don León Leal Ramos, y es entonces cuando comienza a resurgir. En su tiempo se aprueban unas nuevas ordenanzas y se empiezan a intensificar los cultos, pero su mandato solo dura tres años. En 1920, siendo párroco y director espiritual D. Lorenzo López Cruz, se hace cargo de la cofradía D. Julián Murillo Iglesias, que habría de permanecer en la mayordomía más de 25 años. En su tiempo toma la cofradía gran auge. La junta directiva que él preside reforma la capilla de Jesús Nazareno e inicia la reforma de la capillita de la Virgen de la Misericordia; durante su gestión se adquiere la nueva imagen de la Virgen de la Misericordia, el paso completo del Calvario; establece la Procesión del Silencio (que se celebraba el Sábado Santo con la Virgen de la Misericordia) y se da mayor esplendor a las procesiones, renovando su espíritu penitencial e iniciándose la presencia de hermanos de escolta encapuchados portando cirios. En 1940, y por iniciativa del entonces Obispo de la Diócesis, Mons. Francisco Cavero Tormo, se establece el Besapié anual de Jesús Nazareno.

D. Santos Floriano Cumbreño, accede a la mayordomía de la cofradía en 1946, y permanece al frente de la misma hasta su muerte en 1976, sucediéndole en el cargo su yerno, D. Germán González Rodríguez, que cesó en 1996. Durante todo este período de tiempo (1946-1996), ha sido secretario de la cofradía, D. Juan Ramón Marchena Pérez, y por todo ello la Junta de Gobierno casi no varió y fue, en la práctica, una continuidad.

Bajo el mandato de D. Santos Floriano se toma como emblema de la cofradía la Cruz de Santiago, se adquieren las andas procesionales de Jesús Nazareno, las del Cristo de las Indulgencias y la Cruz de Guía. También se adquieren en este período los pasos de la Caída y la Exaltación de la Cruz.

Durante la mayordomía de D. Germán González se adquiere, para la imagen de Jesús Nazareno, una rica túnica de terciopelo morado, bordada en oro por las monjas Mercedarias de Sevilla, y que fue estrenada en el novenario de 1.994.

En el mes de diciembre del año 1996, y en la Junta General Extraordinaria convocada al efecto, se elige un nuevo Mayordomo. El cargo recae en la persona de D. César García González.

Al comienzo del mandato del nuevo Mayordomo, se adquiere en arrendamiento un local en la plaza de Santiago, para Casa de Hermandad de la Cofradía, que es bendecida por el Obispo de la Diócesis el día 4 de Marzo de 1997, donde además de servir de sede, estando allí instalados los servicios de Secretaría y Tesorería, se tienen las reuniones de la Junta de Gobierno y un pequeño almacén para diversos enseres, como ropas, faroles, y documentación varia.

Con esta nueva Junta de Gobierno se adquieren, en los talleres sevillanos de Orfebrería Andaluza, y para el paso procesional de Jesús Nazareno, unos faroles de alpaca plateada y unas varas de palio para el paso de la Virgen de la Misericordia. También para el paso de la Virgen se compran unas nuevas andas de hierro forradas de madera y se adquiere un nuevo manto en terciopelo negro, bordado en oro, y la hermana de la cofradía Dª. Teresa Marzo confecciona el techo del palio y las bambalinas.

A la Virgen le regalan dos mantos: uno para diario y otro para el Quinario y otras fiestas, ambos en terciopelo negro con agramán y puntilla, y a Jesús Nazareno le obsequian con una túnica nueva para procesión.

Durante la Novena del año 2000, concretamente el día 14, fiesta de la Exaltación de la Cruz, y previa petición de la cofradía, el Obispo diocesano, en su visita al templo parroquial y presidiendo la Eucaristía, nos comunicó, públicamente, que el domingo siguiente día 17 y en la ceremonia de la Fiesta Principal, nos concedía el privilegio de poder obtener el Jubileo y las indulgencias concedidas al mismo, a todos los asistentes a citado acto, dado que concurre tal cantidad de fieles que abarrotan por completo el templo.

Con fecha 26 de Febrero del año 2001, recién cumplidos 83 años, fallece el Hermano de Honor y antiguo secretario de la cofradía, D. Juan Ramón Marchena Pérez. A los funerales, celebrados por expreso deseo de su viuda y toda la Junta de Gobierno de la cofradía en la iglesia parroquial de Santiago de los Caballeros, asiste gran cantidad de público, tanto hermanos de esta cofradía como de otras cofradías, además de numerosos particulares y autoridades civiles y militares, debido a que se trataba de una persona de relevancia pública.

En la Junta General de Hermanos del año 2001, fueron aprobados los nuevos Estatutos, que reforman ligeramente los del año 1997, acordándose, entre otros asuntos, el nuevo distintivo de la Cofradia.

Durante la mayordomía de D. César García se acomete la adquisición de una nave en el Polígono Ganadero de Cáceres, que sirve desde entonces como almacén para las andas y enseres de la Cofradía, así como para local de ensayo de la banda de Cornetas y Tambores del Nazareno y, tras la disolución de ésta, para la Agrupación Musical Virgen de la Misericordia, que fue creada en 2016.

El mandato de D. César García González (que falleció el 18 de octubre de 2021) se caracterizó por una profunda renovación de los enseres de la cofradía y la restauración de imágenes, así como una puesta al día en nuevas tecnologías para el archivo, contabilidad y secretaría, además de establecer nuevos cauces de comunicación con los cofrades y dar un nuevo impulso en lo que a espiritualidad se refiere. Su mandato duró hasta finales del año 2011, sucediéndole en el cargo quien había sido anteriormente secretario y vicemayordomo, D. Santos Benítez Floriano. En breves fechas ampliaremos la información sobre la etapa de D. Santos Benítez al frente de la cofradía.